La angustia es una intensa sensación de ansiedad y sufrimiento emocional. Puede ser causada por eventos estresantes o traumas y afecta a adolescentes y adultos. Los síntomas incluyen preocupación constante, dificultad para relajarse y síntomas físicos como dolor de cabeza o tensión muscular.
Tratar la angustia es esencial para evitar que se convierta en un problema crónico que afecte la salud mental y física. La terapia, la meditación y el ejercicio son métodos efectivos para reducir la angustia y mejorar el bienestar general.
